El objeto de los repartidores de coste es medir el consumo de calefacción de las viviendas que forman parte de un edificio en propiedad horizontal dotado con un sistema de calefacción central.
Estos medidores se instalan en cada uno de los radiadores de la vivienda de forma sencilla y para lo que no se requieren obras de ningún tipo. Actualmente son electrónicos y las lecturas de consumos se recogen por vía radio por lo que, una vez instalados, no es necesario volver a entrar en la vivienda para efectuar la lectura.
Aunque en España, estos dispositivos son muy novedosos, en otros países europeos se utilizan desde hace más de 80 años.
Todos los repartidores de costes que se instalan deben estar fabricados de acuerdo a la norma europea UNE EN 834:1994. De acuerdo a dicha norma los repartidores de costes miden dos temperatura, la de la superficie del radiador y la temperatura ambiente de la habitación donde está instalado.
Estos dispositivos toman medidas cada cierto intervalo de tiempo (de 2 a 4 minutos), entendiendo que el radiador está en marcha cuando la diferencia entre ambas temperaturas es mayor de 5ºC. Los repartidores registran así la integral de la diferencia de temperatura entre sus dos sensores.
No es necesario calibrar los repartidores de costes, ya que la calibración de estos dispositivos se ha llevado a cabo en los laboratorios homologados donde se han realizado los ensayos según la norma UNE 834:1994. En CONTADORES FUENTES trabajamos con repartidores de costes Metrona que han sido ensayados en el laboratorio independiente WTP en Berlín donde se hacen las pruebas necesarias con todo tipo de radiadores y esto hace que Metrona cuente con una de las bases de datos más amplias del mercado. Estos ensayos se realizan en cabinas equipadas según la normativa DIN EN442.
El sistema utilizado por los repartidores de costes es un sistema de proporciones (valores adimensionales). Los valores registrados en los repartidores de cada radiador indican la cantidad de calor que han consumido los vecinos de una vivienda en relación con el consumo del edificio.
Para un correcto funcionamiento de los repartidores de costes es muy importante que la instalación de estos dispositivos sea la correcta, ya que una instalación deficiente puede provocar que el dispositivo no funcione correctamente, enviando datos erróneos de los repartos del consumo energético, provocando la insatisfacción del cliente.
La instalación se realiza de acuerdo a la norma UNE-EN834, en base a las pruebas realizadas en laboratorios homologados que indican la mejor situación para el correcto funcionamiento de estos dispositivos. Para ello contamos con los manuales necesarios de montaje de Metrona, en los cuales se especifica exactamente, para cada modelo de radiador, como tiene que ser el montaje.
El consumo de calefacción de cada radiador en € se calcula asi:
Siendo:
El precio (P) de la unidad de calefacción es único para todo el edificio y se calcula de la siguiente manera, por ejemplo:
Una caldera de calefacción central ha tenido los siguientes gastos para la Comunidad:
Todo ello hace un total de 16.100 €.
Los costes fijo (por ejemplo, 40% de 16.100 €) se reparten en partes iguales o por coeficiente de propiedad a cada vecino.
Los costes variables (el resto, 60% de 16.100 €, es decir 9.660 €) se repartirán en base al consumo real, siendo este la suma de los consumos medidos por los contadores. Si por ejemplo, el consumo del edificio con 25.000 unidades de calefacción, entonces:
La forma de reparto del gasto es, hasta el momento, potestad de la Comunidad de Propietarios, así como el porcentaje destinado a repartir por coeficiente. En algunos países como Alemania, Dinamarca, Austria, Rumania, etc. existe legislación muy concreta en este tema, mientras que en España, por el momento, carecemos de ella. La experiencia recomienda unos valores que suelen oscilar entre el 30% y el 50% (lo aplicado en otros países de nuestro entorno), pero la última decisión la tiene la Comunidad de Propietarios.